¿A QUIÉN CREERLE?
Hemos llegado al momento en que ya no se sabe a quién creerle. Los señores Santander Lopezsierra, conocido en la Guajira como “El hombre Marlboro”, y el señor Alfonso Hilsaca, conocido como “El turco Hilsaca”, han negado rotundamente, hasta ahora, la entrega, a través del hijo del Presidente, Nicolás Petro Burgos, la entrega de grandes sumas de dinero para la campaña presidencial del hoy Presidente.
Por otra parte, el actual presidente de #Ecopetrol, Ricardo Roa, quien se desempeñó como gerente de la Campaña política, niega de manera categórica que a la misma hubieran ingresados dineros ilícitos, y menos, de “El hombre Marlboro” y de “El Turco Hilsaca”.
Estos dos nombres mencionados como aportantes de la Campaña “Petro Presidente”, inicialmente los dio a conocer Daysuris Vasquez Castro, la ex esposa del hijo del Presidente, en medio de un perturbado estado mental y emocional producto de los celos con Nicolás por haber decidido terminar su relación con ella, lo cual aprovechó o manipuló la periodista Vicky Dávila, de la Revista Semana, llevándola a una entrevista al canal de la Revista, no se sabe a cambio de qué, ni de quién vino la orden para hacer tan rastrero, bajo y sucio trabajo.
Este jueves 3 de agosto, y como consecuencia del principio de oportunidad al cual se acogió Nicolás Petro con la Fiscalía para confesar la verdad, dejó conocer que efectivamente el dinero sí lo recibió de parte de las personas señaladas, el “El hombre Marlboro” y “El Turco Hilsaca”, pero que sólo una parte de él ingreso a la campaña política de su padre, el hoy Presidente, y con las otras, se quedó con ellas.
Toca decirlo, el que verdaderamente debe responder por todos estos hechos es el gerente de la Campaña, el recién escogido presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa; y entendiendo, por experiencias propias, que casi nunca el candidato, y menos, si es a la Presidencia de la República, tiene contacto o información de los dineros que ingresan. La ocupación de un candidato en Campaña es la de atender reuniones políticas, hablar con la gente, desplazarse por diferentes sitios del país, como en este caso.
Los candidatos de una campaña presidencial se ocupan, por lo regular, de asistir a foros, congresos, debates, universidades, y aún, asistir a eventos de carácter internacional, pero nunca, repito están al tanto de los dineros que ingresan, para eso hay todo un equipo financiero y gerencial.
El proceso avanzará y será la justicia, actuando con rectitud y con pruebas ciertas y comprobadas, la que finalmente determine la responsabilidad o inocencia de cada una de las personas vinculadas a este proceso penal.
Casi todas las últimas campañas presidenciales en Colombia han tenido estas dificultades y enredos judiciales por supuestos ingresos de dineros ilícitos a sus campañas.
Las tuvo Ernesto Samper con los hermanos Rodríguez Orejuela, narcotraficantes del Valle del Cauca; Duque, con José Guillermo Hernández Aponte, alias «El Ñeñe Hernández», un ganadero, empresario y narcotraficante oriundo del departamento del Cesar; Oscar Iván Zuluaga, ex candidato presidencial, está actualmente respondiendo por dineros de Odebrecht ingresados a su campaña de manera ilícita, donde también vinculan a su hijo, David Zuluaga Martínez.
No he escrito esta nota para abogar por nadie. Sólo abogo por la verdad y para que sin sesgos y respetando el derecho a un juicio justo se imparta justicia y se condene a quien tenga que condenarse y se declare inocente a quien así lo demuestre.
Finalmente, no puedo cerrar esta nota sin expresar mi tristeza y lamentar todo por lo que está pasando la familia del Presidente y también, por el daño que se le continúa haciendo a la democracia cuando siguen ocurren estos hechos.
#noticiasvital
